“¡Quiero que paguen por lo que han hecho. Le quitaron la vida como si nada. En mi casa ni mis hijos ni yo dormimos por el miedo que tenemos!”, dijo María Esther Orellana, la esposa de Jorge Gustavo Salvatierra, el hombre asesinado a balazos el 3 de febrero en Villa Mariano Moreno durante una pelea con sus vecinos Mariano Gastón Luna (22 años), Franco Emiliano Luna (28) y Gabriel Lisandro Mendoza (20).

En una audiencia realizada ayer, el auxiliar fiscal Miguel Fernández dividió el hecho en dos partes. El primero tuvo lugar el 2 de febrero entre las 21.30 y las 23.30, aproximadamente. La víctima se encontraba junto a su familia en su casa, ubicada en Calle 45, Villa Mariano Moreno, cuando su hijo, Gustavo Orellana, le comentó que mientras caminaba con su pareja pasaron por la casa de las familias Luna y Mendoza, los imputados Gabriel Mendoza y Franco y Gastón Luna comenzaron a gritarle palabras inapropiadas a su esposa.

Por este motivo, Salvatierra y Orellana fueron a hablar con los jóvenes. “En ese momento, Franco Luna efectuó un disparo hacia abajo y el proyectil le rozó en la pierna a Salvatierra provocándole una lesión superficial en la pantorrilla por lo que se retiraron del lugar”, relató el representante del Ministerio Público.

María Esther Orellana denunció la agresión en la comisaría de Villa Mariano Moreno, hecho que habría molestado a los tres acusados al punto de amenazar a la familia Salvatierra.

El desenlace del episodio fue a la madrugada del 4 de febrero. Salvatierra se dirigió nuevamente con su hijo a hablar con Mendoza y los hermanos Luna. Al llegar a la cuadra de los imputados, los tres amenazaron de muerte a Jorge y a Gustavo mientras esgrimían armas de fuego. “Gastón Luna efectuó un disparo al aire y luego Franco Luna apuntó contra Salvatierra y le efectuó dos disparos. Uno le impactó en su mentón y otro en la zona del tórax”, explicó Fernández. Salvatierra falleció en el Centro de Salud.

El caso está siendo estudiado por la Fiscalía de Homicidios II, a cargo de Carlos Sale. La hija menor de la víctima, C.G.T, en Cámara Gesell manifestó que había una enemistad debido a que los jóvenes acosaban verbalmente a las mujeres de la familia Salvatierra.

“Ella dijo que ya desde el año pasado cuando iba caminando le tiraban besos y le decían siempre cosas indecorosas, y que eso es en definitiva, lo que generó un conflicto entre ellos”, expuso Fernández.

El MPF acusó a Franco Luna de ser autor de los delitos de abuso de armas y de homicidio agravado por uso de arma de fuego. A Gastón Luna y Gabriel Mendoza los acusó de ser coautores del delito de amenazas agravadas por el uso de armas de fuego.

El defensor de los acusados por amenaza, Facundo Guerrero, no se opuso a la medida de coerción. Los abogados de Franco, Exequiel Prado y Nicolás Medina, sí se mostraron disconformes y solicitaron el arresto domiciliario.

Finalmente el juez Gonzalo Ortega resolvió hacer lugar al pedido de la Fiscalía. 

(Producción periodística: Micaela Pinna Otero)